domingo, 30 de septiembre de 2012

Ganas...





Que ganas de besarte intensamente...
de entregarme a ti como la primera vez
descubriendo aquellos lugares que te encendian, la primera caricia,
el sabor de tus labios,  tus jadeos hasta ese dia desconocidos por mis oidos

Que ganas de sentir las primeras embestidas, la bienvenida de mi humedad a tu rigido sexo;
la piel estremeciendose, acostumbrandose a un nuevo cuerpo.
Sentir ese vértigo, sin saber si te dejas caer en el abismo, con miedo de perder el equilibrio.

La luz al final del tunel, la sangre golpeando la cabeza...
el infierno exquisito entre las piernas...

Que ganas de sentirte dentro como la primera noche en la alfombra;
girando entre muebles y decoración,
la batalla donde no habria vencedor.

Ganas de morder tu cuello, de lamer tu sexo hasta que el sol cegara nuestros ojos;
latidos infinitos, de una noche que nos negabamos a despedir.

Que maravilloso aquel encuentro de dos desconocidos que se reconocian con las manos,
con pulsaciones y gemidos.

Que ganas cariño mio de volver a ser tuya
tenerte detrás de mí...y con tu lengua cortandome desde la raíz,
recitandote poemas,con entrecortadas palabras...

Seres mundanos, próscritos, buscando refugio en la piel ajena,
alimento en la saliva desconocida.

Buscando redención en orgasmos que nos han arrastrado hasta el momento
cumbre, en donde la espada de doble filo amenaza tu cuello y el mio...
un beso más...y la sangre será derramada.



















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